La Presidencia de Luciano Urquijo (1926 al 1931) trajo gran inestabilidad y aunque bajo su tutela el Atlético de Madrid jugó la primera Liga y ganó el campeonato regional en 1928 los problemas económicos del Club, los malos resultados y el traspaso de los jugadores del Atlético al Real Madrid, que esto era también en la época una práctica común, entre ellos a la estrella Triana o Luis Olaso terminaron de hundir al equipo.