Implican una sanción de diez minutos, y si es reincidente en el mismo partido supone la expulsión definitiva. Se pitan por golpear al rival con el stick sujetado con ambas manos (cross-checking), por levantar el stick para golpear al rival en la zona superior del cuerpo (high-sticking) o golpearle en la zona inferior (slashing), por agarrar al rival o a su stick (holding), por agarrar al rival con el stick para frenarlo (hooking), por interferir a un jugador o al portero (interference), por golpear a un jugador sin razón o justificación (roughing), por golpearle con el codo (elbowing), por zancadillearlo (tripping), simular una falta (diving) o demorar el juego de forma intencionada.